martes, 22 de abril de 2008

El futuro de la economía mundial jaqueado por las tecnologías de convergencia.

Una visión estratégica

Alberto L. D'Andrea
Revista Fortuna. 24 de junio del 2008

Cuando en 1900 el físico alemán Max Karl Ernst Ludwig Planck postuló la mecánica cuántica basada en el caracter discontinuo y cuantificable de la energía, estaba muy lejos de imaginar su incidencia en el mundo actual. A más de 100 años de la mecánica cuántica postulada por Max Planck (1858-1947) nos sorprende la cantidad asombrosa de aplicaciones prácticas presentes en la hora actual. Alrededor del 30% del PBI de los Estados Unidos depende de innovaciones tecnológicas basadas en la mecánica cuántica. Podemos citar algunas: los semiconductores de los chips insertos en las PC, el láser de los lectores de CD o los aparatos de formación de imágenes por resonancia magnética de los centros de salud.
A fines del siglo XX el estado del conocimiento científico universal adquiere un alto grado de desarrollo conducente a nuevas tecnologías cuyo impacto estratégico y económico en el presente y futuro no tendrá parangón alguno en la historia de la humanidad; superando extraordinariamente al de las innovaciones tecnológicas inspiradas en la mecánica cuántica.
Cada una de éstas tecnologías por sí mismas revoluciona el mercado socioeconómico pero se intersectan en campos comunes en los cuales las innovaciones en una tecnología potencian a las de las otras creando un contexto de avance exponencial donde lo otrora imposible comienza a ser factible.
Tres de las tecnologías conocidas como convergentes: la nanotecnología, la biotecnología y la informática están en etapas activas de su desarrollo. La cuarta, la ciencia cognitiva, necesita de la convergencia de las tres para su evolución como ciencia y posterior aplicación tecnológica. A su vez la aplicación de la neurociencia cognitiva también potenciará nuevas innovaciones en las otras tres áreas.
Las tecnologías de convergencia se las suele denominar internacionalmente con las siglas NBIC (Nanotecnología-Biotecnología-Informática-Cogno). Cada una se identifica con una unidad funcional: nanotecnología con átomo, biotecnología con gen, informática con bit y lo cognitivo con neuronas
Las tecnologías de convergencia brindan posibilidades únicas de dar respuestas socioeconómicas a las necesidades humanas primarias en un mundo acechado por un crecimiento demográfico de 3000 millones de habitantes entre el año 2000 y el 2050, con contaminación creciente producto de la actividad humana y agotamiento de los combustibles fósiles y recursos naturales en general.
Las tecnologías de convergencia se ubican en la cima de la preocupación de los estrategas de inteligencia en los países avanzados y en el centro de atención-inversión de las grandes empresas transnacionales que observan cómo en el tablero del ajedrez económico el juego se desplaza de la estrategia centrada en las TIC (Tecnologías de la Información y Comunicación) a una más amplia centrada en las tecnologías de convergencia. Un jaque mate al futuro de la economía mundial con la posibilidad ulterior de jugar una nueva, estratégica e inteligente partida.

No hay comentarios: